Morelia, Mich., 21 de junio de 2023.- La Lengua de Señas mexicana debe ser considerada dentro de nuestra legislación como patrimonio cultural, subrayó el diputado Víctor Zurita Ortiz, presidente de la Comisión Especial para la Atención de Personas con Discapacidad en la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
En ese sentido este miércoles el diputado integrante del Grupo Parlamentario de Morena, presentó una iniciativa para reformar la Ley de Desarrollo Cultural para el Estado, a fin de concretar en la norma dicho reconocimiento.
“La Comunidad Sorda se agrupa bajo la premisa de un derecho de identidad cultural, centrado en la Lengua de Señas Mexicana, que de acuerdo a la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad, se define como: Lengua de una comunidad de sordos, que consiste en una serie de signos gestuales articulados con las manos y acompañados de expresiones faciales, mirada intencional y movimiento corporal, dotados de función lingüística, forma parte del patrimonio lingüístico de dicha comunidad y es tan rica y compleja en gramática y vocabulario como cualquier lengua oral”.
Víctor Zurita recalcó que la propia definición normativa genera una identidad y una cultura de la Comunidad Sorda, a la cual se le debe reconocer el derecho a definir sus propios rasgos culturales, los cuales se manifiestan en buenas costumbres y reglas de convivencia al interior de su comunidad por lo que estos usos y costumbres constituyen un agregado a la Cultura Nacional y Estatal.
“Si alguien me pregunta qué ha sido para mí la lengua de señas, les respondería que es mi lengua materna, la ventana a mis primeros significantes y la relación con el entorno, pero sin duda, lo más importante es que me ha permitido desarrollar un sentimiento de identidad y pertenencia con una comunidad”.
El legislador explicó que la lengua de señas es el idioma original de quienes son sordos, su historia, su gramática, su estructura es tan rica y compleja en vocabulario como cualquier lengua oral.
“La lengua de señas me ha dado la oportunidad de ejercer de manera efectiva varios derechos como la libertad de expresión, el intercambio de ideas, el acceso a la educación, al trabajo y a la participación en la vida pública y privada. Es por ello, que he buscado que la lengua de señas sea reconocida como un derecho consagrado en nuestra constitución local, pero no he encontrado eco en algunos de mis compañeros diputados”.